Padre, fuente de toda santidad,
te doy gracias especialmente
por haber entregado a la Iglesia
al beato don Felipe Rinaldi:
por haberlo llamado a ser
animador y propulsor de la
espiritualidad de San Juan Bosco,
y por haber iniciado en la
Familia Salesiana diversas
realidades carismáticas.
Animado por el Espíritu Santo, te ruego
glorifiques con la canonización
a tu siervo fiel don Rinaldi, que tanto
te ha amado y servido en los hermanos,
y que me otorgues las gracias necesarias
para realizar en mí tu proyecto de salvación.
Concédeme, por su intercesión la gracia de
la sanación en mi cuerpo y en mi espíritu.
Te lo pido por Cristo, tu Hijo y nuestro Señor.
Amén.
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