Que la tierra se haga camino ante tus pasos,
que el viento sople siempre a tus espaldas,
que el sol brille cálido sobre tu cara,
que la lluvia caiga mansamente sobre tus campos,
y hasta tanto volvamos a encontrarnos,
Dios te guarde en la palma de su mano.
Amén.
(antigua oración irlandesa)
No hay comentarios:
Publicar un comentario